HOLA, SOY PATRICIA.
Consultora y diseñadora de marcas.
Especializada en identidad visual y creadora del método Branding Vincular®
Creo estrategias de Marca, acompañadas por herramientas de desarrollo personal y diseño Identidades Visuales capaces de transmitir emociones y crear vínculos con los clientes.
Es un proyecto que nació de la necesidad de tener una vida coherente y alineada a mis valores. En esa búsqueda encontré la manera de encontrar mi verdadera identidad y sentirme en armonía y lo que hice fue llevarlo a mis procesos de creación de marca.
Momo nació para despertar a esas marcas que saben lo que valen pero no saben cómo mostrarlo al mundo.
Transformar y elevar los proyectos de mujeres comprometidas a través de un diseño estratégico y con propósito se ha convertido en mi mayor pasión.
Siempre he tenido una sensibilidad especial.
Y ahora la pongo al servicio de las personas junto al gusto por la belleza, los vínculos y los detalles.
He vivido muy condicionada por percibir el mundo desde otra mirada. Esto tuvo sus pros y su contras, pero de lo que estaba 100% segura era de que yo ME SENTÍA DIFERENTE.
Pasé la mayor parte de mi infancia jugando a tener mi propio mundo, con mis propias reglas, mis ritmos e ideas locas. Soñé con un montón de pasiones y posibilidades. Me interesaba la publicidad, el teatro, la psicología, incluso me atreví a tener mi propio taller de artesanía.
A mis 24 años llevaba casi una década trabajando mientras estudiaba al mismo tiempo. Tras finalizar mis estudios, salí al mundo como un borrego más haciendo lo que se supone que tenía que hacer.
“Lo que sea, pero que tenga salidas”.
Ahí estaba yo, con mi título en informática, trabajando con gusto pero sin ningún propósito de vida.
Después de una crisis económica y algún que otro chasco laboral decidí cambiar de rumbo radicalmente.
Comencé a estudiar lo que realmente me apasionaba y lo que me ovía en ese momento. Me formé como diseñadora gráfica, animadora, editora de vídeo, postproducción y efectos especiales. Un mundo nuevo lleno de creatividad y de posibilidades.
Durante varios años trabajé en televisión, cine y agencias de publicidad. Hice muchas campañas para pantallas de gran formato en aeropuertos a nivel mundial, así como para marcas muy relevantes.
A los pocos meses de traer a mi bebé al mundo, una pandemia mundial lo paraliza todo. Y con ella mi decisión de poner foco en lo más importante. Ya no estaba dispuesta a seguir viviendo en piloto automático, de ir a mil por hora, y tener la sensación de no llegar a nada y mucho menos de tener que encajar en un molde que no es para mi.
Me di cuenta de la importancia de vivir consciente, de conectar conmigo, con mis seres queridos, con mis propios valores y tener una vida coherente.
Comencé a construir un negocio por mi cuenta, a mi manera.
Donde sí hay cabida a percibir el mundo desde otro ángulo y darle el lugar que le corresponde. Por eso, mi misión es ayudarte a poner en valor tu esencia, encontrar tu lugar y ayudar a expresar tu marca como se merece para mostrarla al mundo.
Esta es mi manera de construir un mundo mejor, poniendo mis talentos al servicio de las personas junto al gusto por la belleza, los vínculos y los detalles.
“Transformar y elevar los proyectos de mujeres comprometidas a través de un diseño estratégico y con propósito se ha convertido en mi mayor pasión.”
DATOS CURIOSOS
Conoce la historia de MOMO
Hoy te voy a contar un cuento…
Hace unos años una pequeña se sintió atraída por un libro que alcanzó a ver en la estantería de la habitación de sus padres. La portada, a pesar de no parecerle especialmente bonita le resultó extraña y le pareció algo misteriosa. La niña, curiosa por naturaleza, cogió el libro y le pidió a su madre si podía leerlo. Su mamá le dijo
“no se si lo entenderás pero claro que puedes leerlo”, así que ella no lo dudó y fue a su habitación a leerlo de inmediato.
Pasado un tiempo la niña terminó de leer el libro y algo en ella se removió.
Ni siquiera ella sabía por qué…
La historia del libro, hablaba de las vivencias de una niña llamada Momo, una personita muy especial con el don de saber escuchar a los demás. Era empática, sensible, generosa, y muy amiga de sus amigos.
Ella sabía aprovechar el tiempo en lo que realmente le aportaba valor a su vida y la de sus seres queridos. Tenía una vena rebelde, pues iba en contra de muchas reglas impuestas por la sociedad y que ella desde el punto de vista más inocente y sabio a la vez, se negaba a dar por sentado.
Ella lo cuestionaba TODO.
La llegada de los hombres grises, hizo que estos se apoderaran de lo más valioso que tiene el ser humano… el tiempo.
La gente ya no tenía tiempo para estar en comunidad, charlar de sus inquietudes y todos eran presos de su propio tiempo.
Momo siempre reunía a sus amigos en un anfiteatro para dar espacio a la reflexión y emprender nuevas aventuras para vencer a los ladrones del tiempo.
Habrás adivinado que esa niña que leyó la novela de Michael Ende llamada Momo y le dejó un poso importante, soy yo.
Cuando de adulta me hice consciente de que estaba siendo arrastrada por esos hombres grises que gestionaban mi tiempo en cosas que a mi no me aportaban nada, me vino a la mente la novela que leí de chiquitita y fue ahí cuando llegado el momento de emprender el nombre de mi negocio no podía ser otro que Momo.
Todos los valores que transmite Michael Ende en esta novela, están presentes en mi propia esencia y por lo tanto en mi marca.
